Redacción.
El Ilustre Colegio de la Abogacía de Barcelona (ICAB), bajo el mandato de su Junta de Gobierno, a través de sus Comisiones del Turno de Oficio, Extranjería, Internacional, Penal Internacional y DDHH y el Grupo de la Abogacía Joven, ha puesto en marcha el Proyecto “UKRANIAN POPULATION ASSISTANCE” con la intención de ofrecer asistencia y defensa jurídica a los ciudadanos ucranianos desplazados.
En el marco de este proyecto, se han articulado diversas acciones que pueden englobarse, principalmente, en:
1º Asistencia letrada y asesoramiento gratuito a las Personas Desplazadas de Ucrania a la ciudad de Barcelona o a cualquiera de las Delegaciones del ICAB.
2º Colaboración y seguimiento en la derivación a los Servicios Sociales de Organismos Públicos y ONGs de la población ucraniana desplazada.
3º Realización y difusión de una “Guía básica de urgencia de Asistencia de Desplazados”.
4º Difusión Jurídica entre el colectivo ucraniano, ONGs y organismos dedicados a la asistencia de la población desplazada de Ucrania, dando a conocer las normas internacionales de protección internacional, de derecho humanitario y Justicia Penal Internacional, para que las víctimas puedan reclamar sus derechos.
5º Seguimiento de las acciones derivadas de la Asistencia en el Proyecto “UKRANIAN POPULATION ASSISTANCE” y de la efectividad de las acciones planteadas, tanto de protección internacional, como de asistencia letrada y los elementos de justicia internacional.
Para Albert Jané, Presidente del Grupo de la Abogacía Joven de Barcelona, “la abogacía de Barcelona debe velar y ser garante de los derechos de nuestros conciudadanos ucranianos desplazados, los cuales se encuentran en un estado de suma vulnerabilidad. Por este motivo, en vista de la agresión que Rusia ha infringido en Ucrania y en la comunidad internacional, el ICAB y el GAJ Barcelona hemos lanzado la presente iniciativa para garantizar sus derechos”.
Pronunciamiento del ICAB sobre la situación de Ucrania
El pasado 24 de febrero, desde la Junta de Gobierno del ICAB se hizo publico un comunicado en el cual se lamentaba y condenaba la decisión de Rusia de iniciar una escalada bélica en el este de Europa. Asimismo se consideraba que “los ataques hacia Ucrania y su población son contrarios al derecho internacional, lesionan directamente a los Derechos Humanos y atentan contra la soberanía de un Estado de nuestro continente”.
