Pol Pol Rubio.
28 de junio de 2018.
Siguiendo con las charlas del futuro que organiza Thomson Reuters España, tras asistir hace apenas un mes a una jornada sobre la Automatización en la redacción de contratos y oportunidades legales en la transformación digital, hemos vuelto a ser espectadores, esta vez del “Corporate LegalTech Forum 2018”.
Con un tono muy informal, Enrique Dans, Senior Advisor en Innovación y Transformación Digital en IE Business School, ha dado comienzo a la jornada con la primera conferencia, titulada “Innovación y transformación: hackeando cadenas de valor”. Ha situado el contexto de revolución digital con muchos ejemplos: el asistente de Google que pide por ti hora en la peluquería, el prototipo de robot doméstico de Amazon, el proceso de compra sin pasar por caja de Amazon Go, el robot Sophia, los coches sin conductor en los que descansar de Waymo.
Ha explicado cómo los jóvenes nacidos en la tecnología prefieren en determinadas situaciones la comunicación con un robot frente a la comunicación con una persona porque les hace sentir más cómodos. Eso implica desarrollos como el chatbot de maquillaje que ha desarrollado Sephora, que objetivamente te dice cada mañana, antes de salir de casa, si te has pintado bien tras mandarle un selfie.
También ha estudiado cómo convertir los datos en dinero, lo cual a día de hoy parece lo más complicado, en atención a la solución que ha encontrado Facebook. La gente se preguntaba cómo iba a amortizar Facebook los 23.000 millones de dólares que pagó por Whatsapp y el plan pasa porque las empresas implementen un Whatsapp corporativo, ya que todo cliente tiene Whatsapp y en ocasiones lo prefiere respecto al trato telefónico. Whatsapp se terminará por vender a nivel empresa para poderse interrelacionar con el resto de aplicaciones que las empresas manejan y crear un contact/call-center completo con el cliente, de manera que, en cuanto el cliente se comunique con la empresa, ésta podrá acceder automáticamente a toda la información que dispone del cliente.
Cerrando su speech antes de dar paso a la próxima sesión, ha recalcado la importancia del Machine Learning como habilidad de futuro para cualquier tipo de profesional y ha matizado la mentalidad hacker, que puede llegar a ser disruptiva; pero debe serlo con sentido y no por concepto.
Sin tiempo para pausas y, como suele ser habitual en este tipo de eventos, ya algo descuadrados con la agenda, hemos continuado con la mesa de debate moderada por el mismo Enrique Dans y que ha contado con la participación de Ángela Rodríguez, Legal Executive y Responsable del Área de Nuevas Tecnologías de NH Hotel Group, Luis Prendes, Global Director Legal Affairs & Digital Transformation de Telefónica, y Pablo Yun, Jefe de departamento Asesoría Jurídica Comercial de Iberdrola.
El primero en tomar la palabra, Luis Prendes, ha ilustrado que en 1925 Telefónica ya tenía un grupo de transformación de la profesión, y ha expuesto que la transformación tiene que responder siempre a una necesidad. En su caso, Telefónica recibe 850 demandas al día en Brasil, un foro sumamente contencioso donde en los mismos centros comerciales los consumidores pueden presentar demandas y en el que existen pequeñas mafias que afectan al funcionamiento del sistema jurídico. Para hacer frente a tal volumen desarrollaron el algoritmo Jarvis, que en 45 segundos detecta si la demanda es fraudulenta y puede argumentarlo ante un juez.
Ha entendido que la transformación debe estar alineada con 1) los valores, 2) las personas, 3) los procesos y 4) la tecnología; por este orden y con una importancia de mayor a menor.
Y a la pregunta de si “puede ser una Asesoría Jurídica una ventaja competitiva”, ha respondido tajantemente “sin la menor duda”.
Se debe partir de que los abogados tienen la capacidad y energía para hacerlo, pues los resultados se verán a medio-largo plazo, y los primeros pasos serán muy duros. “Los abogados somos artistas”, decía, algo que ya habíamos escuchado recientemente en un foro parecido y nos gusta oír, “pero giramos en torno al precedente” y no solemos preguntarnos por qué un proceso es de una forma u otra.
En Telefónica empezaron los cambios con el puesto de trabajo físico de los abogados. Fueron trasladados al departamento de Internet of Things, rodeados de ingenieros y sin un puesto fijo. Cada cual elegía la hora que entraba, la hora que salía, el sitio en que se sentaba y la gente con la que hablaba. Más pasaron al actual sistema de que los proyectos se licitan a nivel interno, permitiendo a la gente participar en lo que realmente les motiva y ganando nuevas perspectivas al crear nuevos grupos de trabajo. Porque cualquier implementación solo para el departamento legal no tendrá recorrido y fracasará. Necesita involucrar más departamentos para que la empresa luche por ese proyecto y lo entienda como una inversión en una cadena de valor para la compañía.
A continuación, Ángela Rodríguez ha hablado del papel de la Asesoría Jurídica en NH: acompañar la digitalización de determinados departamentos más impactados como el de Ventas. Y vistas al futuro, nos ha adelantado que trabajan en un check-in y check-out on-line como el de las aerolíneas, sin tener que pasar por la recepción, para evitar gestiones presenciales y colas a los clientes.
En último lugar ha intervenido Pablo Yun, que ha sumado a la definición de abogado que es un jugador de póquer. Ha desarrollado dicha idea partiendo de que, hasta ahora, si alguien no te pagaba demandabas, para evitar el efecto llamada, y con los contratos pasaba lo mismo, tenían que ser robustos para evitar que en el futuro litigio te faltara una cláusula que apoyara tu pretensión. Sin embargo, ha considerado que hoy en día la tecnología nos permite tener en cuenta más datos y más completos, que te permiten tomar decisiones que no solo dependen de la intuición y carácter preventivo del abogado, pudiendo llegar a una conclusión racional y eficiente según los recursos de los que dispones de que quizás es mejor plantarse en un determinado punto.
Tras una pausa para el café, Gloria Sánchez, Chief Transformation Officer del Legal Department de Banco Santander, ha iniciado la tercera y última sesión de la jornada: “Adaptación y Evolución de las asesorías legales acompañando al negocio.”
Con el ánimo de no ser repetitiva, ha considerado esencial comunicar y convencer del cambio a las personas, pues si no se consigue las personas tenderán a volver a lo que dominan y tampoco se implementará el cambio. “Claves” son las sesiones de trabajo conjuntas, el brain-storming que permita a todos participar. Otra medida “divertida” que ayuda a dibujar el análisis es el shadowing, el pegarse a un compañero durante un par de días para ver cómo trabaja. Terminado el estudio se deberán enfocar las soluciones, a liderar por los “champions”, la gente realmente motivada que acabará por atraer al resto.
A modo de conclusión, ha abogado por decodificar y desaprender el “orgullo del abogado”, interiorizar que habrá proyectos que saldrán mal, porque si no no seremos receptivos al acto de experimentar. No solo leyendo libros aprenderemos, si no que cuándo más aprenderemos será cuando hagamos.