Redacción.
Una nueva firma irrumpe en el mundo jurídico. Se trata de Epiqueya, despacho de abogados especializado en mercantil, reestructuraciones e insolvencias, liderado por el abogado Bernardo Pollicino, con casi 11 años de experiencia.
Con sede en Madrid (calle del Pinar, 5) y una fuerte vocación internacional a Hispanoamérica e Italia, el Despacho persigue posicionarse como aliado de medianas empresas, fondos de inversión y bancos.
“Deseamos construir un bufete de abogados que, trabajando con denuedo y honradez, consiga ayudar a nuestra sociedad a transformarse y ser mejor. Decía ya el Quijote aquello de que ‘cambiar el mundo no es locura ni utopía, sino justicia’, y ese es nuestro afán, como apasionados de la verdad y la justicia. Consideramos que nada mejor que un buen puñado de abogados para intentar esa hermosa misión de transformar nuestra sociedad para que sea más justa”, señala Pollicino.
El letrado ha determinado su nueva marca con los valores genuinos de la profesión, ideas que a su parecer “se difuminan actualmente, o se olvidan” en el ámbito jurídico. “Cuántas veces nos toca escuchar que la carrera de Derecho se elige si uno tiene buena memoria o si uno pretende sólo un prestigio o busca ganar dinero, y se olvida la esencia del Derecho: esa pasión por dar a cada uno lo suyo, ese ‘hambre y sed de justicia’ que ha caracterizado a los mejores juristas de todos los tiempos. Por eso considero que Epiqueya aporta algo diferente”, razona.
Epiqueya se define como un Despacho de autor. “El término ‘Despacho de autor’, me gusta por ser más castizo que el de boutique, y también porque sugiere una idea que viene de otro mundo que también es de apasionados: el mundo del vino. Epiqueya es un Despacho de abogados que, como el vino de autor, intenta hacer algo diferente en el mundo jurídico, respondiendo a una misión y ejecutando el trabajo con identidad propia -donde ni el más mínimo detalle se debe dejar a la improvisación-, mediante la innovación y, sobre todo, mediante un estilo o un modo de hacer que pretende dejar huella”, afirma Pollicino.
Bernardo Pollicino comenzó su carrera profesional en Moore Stephens. Posteriormente, pasó a formar parte del Despacho Cremades & Calvo Sotelo, donde se especializó en la práctica del Derecho Procesal, Mercantil y Concursal. Se incorporó a Chávarri Abogados hasta que en 2016 dirigió el Área de Concursal del Despacho y en 2018 fue nombrado socio responsable del Área de Reestructuraciones e Insolvencias. Desde 2019 comenzó a liderar el Área de Mercantil y Concursal de Tarsso Abogados, hasta 2022 cuando decidió comenzar a trabajar en la creación de Epiqueya Abogados.
El nombre de marca elegido no es casualidad. El origen etimológico de Epiqueya está compuesto por los términos griegos epi (sobre) y eikaion (lo justo). En palabras del propio abogado, ha querido encontrar “un término sugestivo que transmita la esencia de lo que clásicamente se entendió por Derecho: ‘el arte de lo bueno y de lo justo’ (Celso)”. Por eso, “Epiqueya es un término que nos recuerda que la ley no siempre es justa, y que a veces puede y debe ser corregida. Es un hecho comprobado que las leyes cambian, a veces para mejor y otras veces en sentido contrario”, explica el socio del Despacho.
Rigor académico y cuna de talento
Bernardo Pollicino compagina su práctica como abogado con la preocupación por la investigación y la docencia. En este sentido, es miembro de un proyecto de investigación de excelencia I+D+i con la Universidad CEU San Pablo sobre ‘la construcción del Derecho Concursal Moderno’. Además, es profesor de Derecho Mercantil y Concursal en el Instituto de Estudios Bursátiles (IEB), Centro Universitario de Estudios Superiores adscrito a la Universidad Complutense de Madrid y a la Universidad Rey Juan Carlos.
Sobre si es buen momento para lanzar un Despacho de estas características y con especialidad en Mercantil y Concursal, el experto avanza que “los servicios que ofrecemos están pensados para acompañar a los clientes en sus momentos de crisis, pero también en los de bonanza, y por ello, pensamos ser útiles tanto para solucionar problemas como para prevenirlos”.
El Despacho, que se encuentra en proceso de contratación, y en cuyo plan de crecimiento prevé alcanzar la cifra de 15 profesionales en los próximos 5 años, tiene en su ADN llegar a convertirse en “cuna de talento”, valorando no sólo que un candidato tenga el método y la capacidad técnica, “sino también el alma de lo que es esencial en la profesión”.
“Epiqueya nace como un ‘Despacho de autor’, dedicado a la abogacía de los negocios desde el rigor académico, que persigue contribuir a la sociedad desde un asesoramiento jurídico honrado, ofreciendo servicios de mercantil, reestructuraciones e insolvencias, desde un triple prisma: orientación a negocio, rigor académico e innovación”, concluye su socio fundador, Bernardo Pollicino.
