Las primarias del PSOE

La celebración de elecciones primarias dentro del PSOE para escoger el candidato a la Presidencia del Gobierno, hasta ahora ha tenido éxito, hasta llegar a convertirse en un buen activo publicitario por parte de sus actores. Las primarias se han entendido como un buen mecanismo para seguir avanzando hacia la democratización de la vida pública y hacer que así sea más transparente la toma de decisiones políticas, aquello que siempre comporta tantas quejas por parte de la ciudadanía. Lo que se busca es romper con la imposición interna de los futuros líderes políticos, porque como bien comentan las encuestas, dos terceras partes de los electores exponen que los políticos no se interesan por los temas que realmente preocupan a la sociedad española; y una democratización en el proceso de elección de los futuros candidatos a la Presidencia del Gobierno, que podría fortalecer la identificación de los electores con las instituciones políticas.

Así pues el proceso a seguir en las primarias se basará en una exposición por parte de los varios candidatos de sus ideas y puntos de vista, seguido de unos debates para que los electores se vayan forjando una opinión de cada uno de ellos, y finalizará con la votación. Seguramente, si las primarias se generalizaran a nivel de los partidos políticos españoles cambiaría la manera de entender la política. Un claro paradigma son los Estados Unidos, pero España, que está inmerso en un sistema con listas cerradas y en que el ejecutivo siempre busca una clara estabilidad política, está lejos de este modelo electoral. Evidentemente comportaría un cambio en la actual ley electoral, esto que ha supuesto un tema de discusión tantas veces.

Si nos centramos plenamente en el propio PSOE podemos apreciar cómo Rubalcaba en el comité federal del partido explicó a los representantes de las diversas federaciones que el proceso de primarias abiertas se hará en cada territorio en función de la orden natural de cada reto electoral. Es decir, primeramente las municipales y autonómicas, y a continuación las generales. Según éste, las primarias abiertas del partido serán una “decisión trascendental” que cambiará la política española, creando un punto de inflexión.

EL jefe de los socialistas aprovechó también para hacer balance de estos últimos dos años en que el país ha sido gobernado por el PP, afirmando que ha sido un periodo vertiginoso, en que el partido gobernante “ha perdido la mayoría social porque su deterioro ha evolucionado paralelamente a sus mentiras”. Así mismo afirmó, como ya lo habían hecho con la ley Wert, que si el PP perdía la mayoría cambiarían todas las leyes que supusieran una involución de derechos. Ante esta situación reconoce que “queda un largo camino para recorrer y una gran confianza para recuperar”. Por eso, Rubalcaba ha señalado que aquello que se decida en el propio partido servirá para poder avanzar y así consecuentemente recuperar la confianza del electorado.

Así pues, el discurso de Rubalcaba fue dirigido al camino a seguir por parte de los socialistas, pero sin entrar en ningún momento en la crisis interna del PSC ni en el caso de los diputados que previsiblemente serán expulsados por la dirección de Pere Navarro. Pero sí que evidenció su apoyo a la actual dirección de los socialistas catalanes y al rumbo que han tomado de la mano de los socialistas españoles desde la cumbre de Granada.

En este marco ha confirmado que los socialistas plantearán a la sociedad española sus alternativas en Barcelona y Madrid porque el proyecto que defienden el PSC y el PSOE de manera conjunta es el único que puede permitir “superar esta grave crisis territorial y si no lo abordamos lo único que hará es ir a peor”.