Redacción.
10 de febrero de 2019.
La sección del ICAM dedicada al Derecho de las TIC ha abierto una nueva etapa bajo la presidencia de Alejandro Touriño, “una referencia en la actualidad de la normativa y todos aquellos cambios que afectan a las nuevas tecnologías”, describió el diputado responsable de Comunicación, Juan Gonzalo Ospina, encargado de presentar el acto de reinauguración. Ospina también confió en que la sección contribuya activamente a “mejorar algo que nos afecta a todos como son las TIC y la Ley de emprendimiento”, ya que la jornada inaugural estuvo dedicada a la Ley de Startups desde la óptica de sus protagonistas.
“Hablamos de tecnología como una disciplina absolutamente transversal que impacta todos los sectores de actividad y eso se engancha con el objetivo de la sección, mostrar un objetivo global”, explicó Touriño, ahondando en que desde la sección se pretende “realizar jornadas periódicas y cooperar con otras instituciones, tanto nacionales como internacionales, ya que el Colegio tiene que tener un pie en la calle, en otros lugares donde existe también debate jurídico, y que pueden aportar visiones y prácticas distintas que den lugar a la reflexión”.
En este sentido el tema escogido no podía ser más idóneo: las startups y el mundo del emprendimiento, porque, como indicó el presidente, “hablamos de innovación, hablamos de escalabilidad y llegada a otros territorios y hablamos de tecnología en estado puro. A finales del año pasado el Ministerio lanzó una consulta pública previa a la elaboración del texto del anteproyecto de Ley de de Fomento del Ecosistema de startups, sin que a día de hoy tengamos ningún Derecho positivo que nos permita reflexionar si el legislador acierta o no y por eso es el momento de poner sobre la mesa ideas de gente relevante en el sector que pueda manifestar su visión respecto de los objetivos del mundo de las startups. No podemos perder de vista que España es el 2º país europeo preferido para la creación de startups, el 3º en Europa de atracción del talento tecnológico. Dos ciudades españolas, Madrid y Barcelona, y muy de cerca Valencia, están en el top ten de emprendimiento en Europa, efectivamente tenemos un territorio muy propicio para que el emprendimiento y la innovación crezcan dentro de nosotros”, declaró.
Junto a Ospina y Touriño, el evento contó con la participación de Carlos Mateo, presidente de la Asociación Española de Startups; Jorge Bleda, responsable legal de Leroy Merlin; y Edwin Mata, head of Legal & DPO de Signaturit.
¿Qué es una startup?
Como cuestión inicial se impuso acotar en qué consiste una startup, pero como reconoció Mateo, “nadie se ha atrevido a dar una definición jurídica, aunque sí podemos decir que conlleva ciertas características: es algo diferente y genera tres veces más empleo que las empresas tradicionales”. Por eso, “exigen un entorno normativo peculiar, sobre todo si queremos ser competitivos a nivel global, ya que una startup española que proporcione un servicio compite directamente con otra en Australia”, señaló el ponente.
En esta línea de pensamiento, para Bleda “no es que tengamos que salir de la zona de confort, sino de todo lo que hemos vivido con las PYMES, se trata de poner un poco de orden y saber utilizar las herramientas con que contamos, y tenemos muchas, Valencia por ejemplo lidera la innovación” y es que “tener un conjunto de empresas que sean más disruptivas mejora todo nuestro sistema productivo”, añadió Bleda.
Eliminar trabas burocráticas
Igualmente, los ponentes coincidieron en la necesidad de flexibilizar y hacer más llevaderos los trámites burocráticos que conlleva emprender en España, “sólo falta el sector público, la Administración, y que acompañen las leyes”, alegaba Mateo, “todo el mundo quiere invertir en España, hay un talento brutal, pero las trabas burocráticas son un lastre”, matizaba.
Y es que, como refirió Mata, “las startups han creado todo un submundo asimilado a Sillicon Valley”, pero su situación fuera de la regulación implica distintos problemas, v.g. a la hora de lograr contrataciones, “tenemos que atraer a la gran empresa para que apueste por nosotros, hay Bancos o corporaciones que están intentando crear sus propias startups, pero si una licita en ellas no se fían”, explicó. Además, como apuntó Mateo, “no sólo es una competición a nivel de empresas, también a nivel fiscal, hay que dar incentivos a los emprendedores para que inviertan en innovación”.
Por eso todos los miembros de la mesa reclamaron medidas de distintos ámbitos (fiscales, laborales, más ayuda para formación) encaminadas a potenciar y acompañar el emprendimiento, denunciando otras que por contra (v.g. tasa digital, la regulación catalana sobre las VTC) que, en palabras de Mateo, “entorpecen el emprendimiento”.
