El Corte Inglés, en crisis

Por Àlvaro Comajuan
Barcelona
Traducido por Irene Belanche 

Uno de los negocios más fructíferos de España, la cadena de grandes almacenes El Corte Inglés, no está pasando por su mejor momento. La tragedia de Bangladesh, donde murieron más de mil personas en una fábrica textil donde se producían productos de esta empresa en condiciones indignas y a bajo coste, afectó de una forma importante a la imagen de esta.

Quizás las consecuencias de esta catástrofe no han llegado a afectar económicamente de una forma tan directa a la cadena, sobre todo teniendo en cuenta la presión publicitaria a la que El Corte Inglés somete a la mayoría de los medios de comunicación, pero tanto las nuevas formas de comunicación como las redes sociales están expandiendo información de este tipo, supliendo así los efectos congénitos de los mass media.

El mayor anunciante de España no se encuentra tampoco en la mejor situación financiera, puesto que está en plena reestructuración de su deuda, que asciende a 5.070 millones de euros, ante la drástica reducción de ventas y un considerable aumento de la morosidad en los créditos al consumo que tanto le caracterizan.

En cuanto al aspecto laboral, la presencia mayoritaria de unos sindicatos llamados amarillos (por su proximidad ideológica con la dirección) y la mordaza publicitaria no han evitado escándalos como la reciente condena por parte de la Audiencia Nacional a El Corte Inglés por la discriminación salarial entre hombres y mujeres, dándole un plazo de tres meses para acabar con las desigualdades retributivas a las que están sometidas las mujeres trabajadoras.

Además, la empresa ha modificado los horarios y los turnos laborales, y obligará a todos los trabajadores a trabajar gratis diez horas en domingos y festivos, según consta en el nuevo convenio colectivo del sector de los grandes almacenes, en el que no han participado ni CCOO ni UGT.

Polémicas y más polémicas para una empresa que fue y es líder en el negocio de la distribución de productos y que pasa por una de las peores etapas de su historia.