Compliance Officers y DPOs de los perfiles cualificados más buscados, según PageGroup

Redacción.

La dinámica alcista sugerida durante los últimos años por el área legal del ámbito empresarial parece finalmente confirmarse con la buena cara que ha mostrado en el último periodo, al registrar un crecimiento del 7% respecto a 2016.

Según ha podido analizar la división Tax&Legal de PageGroup, entre las causas que han favorecido esta subida cabe destacar el fuerte repunte experimentado en el mercado de M&A (Fusiones y Adquisiciones) durante los seis primeros meses del año, con un incremento del 84% en volumen de inversión respecto al mismo periodo de 2016 y llegando a alcanzar los 45.000 millones de euros transaccionados.

La consecuente demanda de perfiles expertos ha provocado que los despachos traten de incorporar especialistas en Fusiones y Adquisiciones tanto desde el punto de vista mercantil como fiscal, siendo especialmente valorados aquellos con experiencia de entre cinco y siete años. En este sentido, desde el inicio del presente año PageGroup ha llevado a cabo un total de 19 procesos de selección bajo estos criterios y se estima previsible superar los 23 realizados durante el ejercicio anterior.

La mayor necesidad de este tipo de perfiles, unido a su alto valor y sus características ha provocado una corriente inflacionista a nivel salarial”, asegura Guillermo Marcet, Associate Manager de Michael Page, y añade que “en algunos casos, esta cifra puede superar el 20% comparando con niveles anteriores a 2012”.

Por otro lado, las distintas reformas legislativas que se vienen produciendo están dibujando un nuevo mapa en el sector. En este sentido, son remarcables la Ley Orgánica 1/2015, de 30 de marzo, por la que se modificó el Código Penal y que ha provocado la intensificación de búsqueda y selección de los denominados Compliance Officers, o el nuevo marco europeo de protección de datos, que bajo el Reglamento UE 2016/679, de 27 de abril, regula la protección de las personas físicas en lo que se refiere al tratamiento de datos personales y a la libre circulación de esos datos y obliga, en algunos casos, a incorporar la figura de Data Protection Officer en determinadas empresas.

Todo ello confirma las nuevas necesidades que tienen que afrontar las empresas en este ámbito y, en consecuencia, su apuesta por incorporar perfiles cualificados a sus equipos.