“Las mujeres todavía hemos de hacer un sobresfuerzo para destacar en la abogacía”

Por Gisela Roig y Alexander Salvador.
Barcelona.

Mercè Claramunt i Bielsa es presidenta de la asociación Dones Juristes. Licenciada en Derecho por la Universitat de Barcelona, esta abogada barcelonesa ha sido la Directora General de la Lotería de Cataluña y actualmente es Diputada de la Junta del Ilustre Colegio de Abogados y Abogadas de Barcelona.

Mercè Claramunt Bielsa

Habéis cumplido 25 años como asociación… ¿Qué empujó a la creación de Dones Juristes?

La necesidad de crear un espacio común para las mujeres abogadas, que permitiera poner en común las carencias que sufrían las mujeres, desde una perspectiva jurídica y de género, y generar un espacio de discusión y de creación de estrategias para la defensa de los derechos de las mujeres.

¿En qué contexto se encontraban las mujeres abogadas 25 años atrás?

Las mujeres abogadas tenían la necesidad de un espacio propio. Y la situación de las mujeres, en cuanto al reconocimiento de sus derechos, era todavía peor que ahora. En el ámbito de la familia, en el entorno laboral y en el reconocimiento de la violencia machista como un problema social. Era (y es) necesario poner el acento y las energías y sinergias en estas problemáticas para visibilizarlas, y combatirlas.

La base de vuestros objetivos fundacionales es el cambio social a través del derecho, en pro de la igualdad real, la erradicación de la discriminación y la violencia hacia las mujeres. ¿Cómo trabajáis desde Dones Juristes para conseguirlo?

Es una lucha diaria. Hoy por hoy la asociación tiene 5 comisiones de trabajo: 1) Comisión de violencia machista; 2) Comisión de familia; 3) Comisión de extranjería; 4) Comisión Internacional; 5) Comisión de Igualdad.

Cada comisión trabaja los temas de actualidad, proponiendo temas para hacer formación no sólo a las asociadas sino a la población en general. Se hacen denuncias de aquellos hechos que atentan contra la dignidad e igualdad de las mujeres; y se hace divulgación de los derechos de las mujeres, especialmente dirigido al propio colectivo de mujeres, para ayudar a su apoderamiento.

¿Medidas concretas?

Organizamos actividades de formación (charlas, jornadas, mesas redondas, etc). Prestamos asesoramiento jurídico a mujeres a través de convenios con otras entidades y con instituciones públicas. Generamos espacios de reflexión, de estudio de normativa, de análisis de derecho comparado, hacemos estudios sobre temas de actualidad…

¿Hay igualdad efectiva de género en el mundo del Derecho? En cuanto al círculo de la abogacía, como mínimo, las cifras dan miedo; sólo un 13% de los socios de los despachos de abogados de España son mujeres y la mayoría no cuentan ni con un plan de igualdad.

No hay igualdad efectiva. A las mujeres se les hace muy difícil, por ejemplo, conciliar la vida profesional y la vida familiar. Para determinados ámbitos del derecho, las mujeres continúan posicionándose por detrás de los hombres, por ejemplo en el mundo empresarial (derecho mercantil), y suelen ser relegadas en el Derecho de Familia.

Muchas voces establecen que son absurdas las leyes que obligan a organismos públicos a estar formados al 50% por mujeres y el 50% por hombres, puesto que afirman que la proporción se tiene que formar según las capacidades de cada persona como tal independientemente de su género. ¿Qué opina de esta idea?

Siempre y cuando las mujeres continúen siendo consideradas como un problema, especialmente si se encuentran en edad de procrear, es necesario que existan leyes que procuren evitar la discriminación por razón de género. Hay muchos estudios serios que constatan como las mujeres, con iguales capacidades que los hombres, continúan siendo la última opción para el empresario o para la administración. Y cuando acceden a un cargo, perciben ingresos inferiores a los de los hombres.

¿Y qué piensa de la conciliación de la vida familiar y laboral? ¿Es real? ¿Lo es por igual en los dos sexos?

Tradicionalmente la carga familiar siempre ha recaído sobre las mujeres. Todavía ahora, en el siglo XXI, esto continúa siendo de este modo. Las mujeres tenemos que asumir las tareas de cuidado de los miembros de la familia más próxima y menos próxima. El hecho de que exista una discriminación salarial ayuda a que las mujeres sean relegadas a estas tareas. Y la ausencia de políticas públicas que permitan a los hombres involucrarse más en la crianza de los hijos, por ejemplo, también hace que sea complicado revertir esta realidad.

¿Qué cambios legislativos propugnaríais sobre estos últimos tres temas?

Permisos de paternidad con iguales condiciones que los que tienen actualmente las mujeres, la prohibición de hacer discriminación salarial en función de género y la flexibilización del sistema de trabajo actual, potenciando otras maneras como la jornada flexible, el trabajo por objetivos (y no sólo para cumplir con un determinado número de horas), o el trabajo presencial y telemático.

Hablando de modificaciones legislativas… Trabajáis como asesoras expertas externas en la elaboración de leyes que afectan directamente a los derechos de las mujeres… ¿En qué habéis incidido especialmente?

Hemos trabajado mucho en la elaboración de las bases por la Ley 5/2008, del derecho de las mujeres para erradicar la violencia machista. También en las bases de la Ley para una nueva ciudadanía y para la igualdad efectiva de mujeres y hombres. En el ámbito del derecho de familia, con la modificación de la ley y la redacción del Libro II del actual Código Civil de Cataluña hemos mantenido intensas reuniones con los diferentes grupos parlamentarios y hemos hecho comparecencias al Parlamento para pedir la consideración de algunas cuestiones que, entendíamos, eran fundamentales para defender los derechos de las mujeres y sus hijas e hijos.

Una gran noticia la de la retirada del anteproyecto de la Ley del Aborto de Gallardón…

Sí, era un anteproyecto condenado al fracaso. Su retirada ha sido un triunfo de la lucha feminista. A pesar de esto, todavía tenemos que seguir luchando para parar las propuestas de “retoque” que el Gobierno central quiere hacer a la actual ley.

Actualmente gestionáis más de 25 servicios de asesoría jurídica para mujeres en varios municipios de Cataluña, ofreciendo así apoyo legal gratuito a aquellas mujeres que se encuentran en posición de indefensión en todos aquellos ámbitos del derecho que se los afectan. Háblenos de este trabajo tan extraordinario.

Para nosotros, como asociación es fundamental traspasar la barrera de aquello teórico y poner el ordenamiento jurídico a disposición de las mujeres. Las mujeres tienen que tener acceso al conocimiento de sus derechos y a cómo se ponen en práctica, para hacer efectivo su apoderamiento y que, de este modo, puedan subir un escalón más en la busca de la igualdad efectiva entre mujeres y hombres.

Y sólo en 2012 atendisteis 2.730 mujeres dentro del territorio catalán… ¿Habéis conseguido mucho apoyo por parte de las instituciones públicas?

Nunca es suficiente. Recibiremos algunas pequeñas ayudas para prestar el servicio de forma directa y autogestionado por Ca la Dona. Tenemos contratos o ganamos concursos con algunos ayuntamientos del territorio. Pero los últimos años hemos sido testigos de como las instituciones priorizan el ahorro económico por sobre la calidad del servicio, la perspectiva de género, la trayectoria, etc. Es una lástima, porque esta política nos está trayendo a encontrar servicios dirigidos a mujeres con problemáticas especiales, que están siendo atendidas por empresas de gestión de servicios que ni saben ni tienen perspectiva de género.

Una de las actuales lacras de la nuestro sociedad son los casos de violencia de género. ¿Cómo creéis que la sociedad tiene que afrontar este problema?

Es un problema muy complicado de afrontar. El sistema penal no puede ser la única herramienta para combatir esta lacra. En la medida que no se implementen las políticas necesarias por reeducar-nos como sociedad, no nos quedará más que el Código Penal para revertir (tarde y mal) las situaciones de violencia. Una respuesta que, además, no llega a toda la sociedad. Para poder ganar a la violencia primero necesitamos que los responsables políticos se lo crean. Y a partir de aquel momento, que le den la importancia que tiene realmente, dotando de presupuesto necesario para poner en marcha políticas realmente eficaces.

¿Se está encarando correctamente desde el punto de vista jurídico?

No. Los operadores judiciales (abogados y abogadas, jueces y juezas, personal de la Oficina Judicial, Ministerio Fiscal) no tienen sensibilización y no reciben ninguna formación específica en temas de violencia machista. La única formación que existe es técnica, pero con esto no es suficiente. Si no entendemos porque se produce la violencia, el porqué las mujeres tienen dificultades para romper el vínculo con el agresor y el porqué vuelven a denunciar una y otro vez, no podemos dar una respuesta efectiva al problema.

Para finalizar, una pregunta dirigida a nuestras lectoras futuras abogadas. A día de hoy el número de mujeres que se gradúan en Derecho crece cada año, ¿qué les espera a estas futuras abogadas? ¿Cree qué tendrán que aportar todavía más valor añadido para destacar?

Hoy en día la competencia en el mundo del ejercicio de la abogacía es mucha, pero es verdad que las mujeres tenemos que hacer un sobresfuerzo para destacar. Todo lo que hemos hablado hasta ahora es y estará en el mundo del derecho. Tardaremos tiempo, pero estoy segura que lo conseguiremos….